Por precaución, no recomendamos a nuestras clientas embarazadas el consumo de caviar.

Podemos orientarles hacia productos pasteurizados como nuestros taramas o koshkas, incluido el tarama con caviar o nuestros huevos de salmón salvaje.

Encontrará diferentes ideas de recetas con caviar en nuestro blog.

Para recibir nuevas sugerencias temáticas, síganos en Facebook e Instagram, o suscríbase a nuestra newsletter.

La combinación de vodka blanco y caviar es una elección natural. Esta armonía perfecta, en la más pura tradición rusa, es ideal para caviares intensos o yodados como el Baïka®, Sevruga u Ossetra Royal.

Para los caviares más suaves, como el Beluga, Daurenki® u Ossetra Impérial, preferimos la frescura de un champán ligeramente dosificado o de vinos blancos con buen equilibrio entre acidez y madurez, que estimulan las papilas gustativas y permiten a las huevas liberar sus finos sabores marinos y sus delicadas notas de frutos secos.

Contrariamente a lo que se cree, es mejor evitar los champanes brut nature, demasiado secos, que pueden "romper" el sabor del caviar.

¿Caviar Ossetra? ¿Caviar Baeri Baïka®? ¿Caviar Sevruga Steluga®? ¿Caviar Daurenki® o Beluga?

Para descubrir nuestras distintas variedades de caviar y encontrar la que más le convenga para una primera experiencia, le invitamos a consultar el artículo “¿Qué caviar elegir?”, que le orientará entre las distintas características de los caviares Petrossian.

El caviar se conserva durante aproximadamente un mes en el frigorífico, entre 0 y 4 °C, mientras no se abra la lata.

Una vez abierto, debe consumirse en un plazo de 24 horas, manteniéndolo refrigerado.

El caviar no debe congelarse nunca, ya que esto alteraría su textura.

El caviar se degusta con una cucharilla especial (también llamada “paleta”) de nácar, acero inoxidable o madera dura. Se debe evitar el plata, ya que puede oxidarse y alterar el sabor del caviar.

Descubra nuestra selección de utensilios para servir caviar y disfrute de una experiencia de degustación refinada.

Less is more! El caviar se degusta solo, para una primera experiencia, o simplemente sobre tostadas o blinis ligeramente untados con mantequilla.

Nuestro caviar procede de distintas granjas de cría cuidadosamente seleccionadas en todo el mundo, que respetan estrictamente el pliego de condiciones Petrossian. Estas granjas se encuentran:

– En Europa: Francia, Bulgaria, Italia, Polonia

– En otras regiones: Sudamérica, Asia y África

Puede consultar el origen específico de cada caviar en su ficha de producto, haciendo clic en “más información sobre el producto”.

Justo después de su recolección, el caviar es transportado a los talleres Petrossian en París, Nueva York y Londres, donde nuestros caviarólogos inician el trabajo de clasificación y sublimación. Este proceso de maduración y selección dura entre 3 y 12 meses, según el tipo de caviar y la intensidad de sabor deseada.

Este saber hacer exclusivo de Petrossian transforma un producto bruto y salado en un caviar con sabores complejos y refinados, propio de un gran caviar.