Apodadas « caviar vegetal », las lentejas Beluga son conocidas por sus granos negros, lisos y redondos antes de la cocción, evocando la singularidad y estética del caviar. Para una entrada fresca y sabrosa, combínelas con brotes tiernos, un huevo pasado por agua, láminas de poutargue y un aderezo de mostaza.
Preparación: 20 minutos • Cocción: 25 minutos
Ingredientes para 4 personas
- 300 g de lentejas Beluga
- 4 huevos
- 200 g de brotes tiernos
- 1 poutargue
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 2 cucharadas de vinagre
- 1 cucharadita de mostaza de Dijon
- Sal y pimienta recién molida
Procedimiento
- Enjuague las lentejas, colóquelas en una olla grande con tres veces su volumen de agua fría sin sal (la sal endurece las lentejas) y cocine durante 20 a 25 minutos.
- Escurra y pase por un chorro de agua fría para detener la cocción.
- Lleve a ebullición una olla con agua, sumerja cuidadosamente los huevos y cocine a fuego lento durante 6 minutos, luego sumérjalos en agua fría.
- Enjuague los brotes tiernos. En un bol, prepare el aderezo mezclando la mostaza, el vinagre y el aceite de oliva, añadiendo sal y pimienta al gusto.
- Agregue los brotes y las lentejas al bol. Mezcle bien.
- Ralle finas láminas de poutargue con una mandolina o un cuchillo afilado.
- Pele los huevos con cuidado.
- Coloque las lentejas y los brotes en los platos, agregue las láminas de poutargue y un huevo por persona, termine con un giro de molinillo de pimienta y una pizca de sal.
- Sirva de inmediato.
Fotografías: Aimery Chemin • Estilismo culinario: Coralie Ferreira